Finanzas

Las apuestas deportivas ‘salvan’ el negocio de Codere en España

La crisis también se deja notar en los casinos. Los resultados de Codere en el primer trimestre dan buena cuenta de ello, con pérdidas un 85% más abultadas que hace un año. Solo las apuestas deportivas se salvan de la contracción del consumo en España. La búsqueda de suerte en las salas de apuestas ha aupado un 89% el resultado bruto de explotación en el que es su mercado local, a contracorriente del resto.

El devenir del negocio de apuestas contrasta con la caída del 2,3% en la facturación global de Codere en España. La reducción de los ingresos medios por máquina debido a “la caída del consumo”, reconoce la compañía, no se traslada a las cada vez más numerosas salas de apuestas deportivas. La tentación de probar suerte en unos meses que han llegado cargados de competiciones de relevancia y la regulación de este sector en Valencia y Galicia ha hecho posible pasar de 2,7 millones de euros de Ebitda en marzo de 2012 a alcanzar los 5,7 millones a cierre del primer trimestre de este año.

Tal es la proliferación de estos locales que Codere, única del sector de los juegos de azar presente en la Bolsa española, ya dispone de 1.031 puntos de apuestas, un 46% más que en marzo del ejercicio pasado. Con la implantación de este modelo de negocio en Galicia, la cotizada se convierte además en la primera en tener presencia en las seis regiones españolas con regulación al respecto. El programa de reducción de gastos puesto en marcha en la compañía, también ha contribuido a esta mejora de cifras intermedias.

Peor suerte es la que ha corrido la española en otro de sus mercados fundamentales: Argentina. Los efectos de la ‘ley antitabaco’ en el país austral que no permite ya fumar en muchas salas de juego y apuestas y la devaluación del peso pasan factura a un Ebitda que cae un 7,9% en términos interanuales. Esta cifra de explotación también ha retrocedido en Italia, la principal apuesta internacional del grupo dentro de Europa. Los nuevos impuestos a las máquinas tragaperras y la caída de los ingresos en las salas de bingo.

En términos globales, Codere cosechó pérdidas por 20,9 millones de euros en los tres primeros meses del año, cuando en 2012 tan solo se dejó 11,3 millones. Sin embargo, el Ebitda alcanzó los 62,1 millones de euros, en línea con la previsión de quedarse entre los 60 y los 63 millones. La española dispone de un parque de 54.007 terminales de juego, 178 salas de juego, 1.206 puntos de apuestas y 4 hipódromos, además de una división de juego online en Italia.

Este martes en que cotizaba sus cuentas, las acciones cotizadas en Madrid del grupo se apuntaban caídas de hasta el 9%, aunque siempre mantenía a salvo la cota de los 2,00 euros por título. La previsión de que, pese a la pujanza de las apuestas deportivas, el negocio de Codere siga deteriorándose por la atonía del consumo en Europa pesan con fuerza sobre su gráfica, al punto de convertirla en una de las más bajistas de todo el parqué madrileño. Así lo reconocía en un comunicado en el que achacaba a “los cierres temporales de salas en México y al bajo rendimiento en Uruguay y Colombia” la reducción de sus previsiones.

Más información