El billete verde cede hasta cotas de hace dos semanas en su cruce con su homólogo japonés. La economía estadounidense, según señalan en Bloomberg, es el principal culpable de ello. El dólar se ha desacelerado frente a la moneda japonesa debido a que los rendimientos de los Bonos del Tesoro a 10 años se redujeron a un mínimo de nueve meses. Así las cosas, los inversores apuestan por otros activos más seguros como, precisamente, el yen.
Por su parte, el dólar de Australia ha avanzado tras conocerse un informe del Banco de Australia que asegura que el gasto nacional ha superado las expectativas de los analistas. Además, los datos de ventas minoristas en Alemania y la inflación en España podrían suponer nuevos estímulos por parte del Banco Central Europeo.
Así las cosas, el dólar ha cedido un 0,3% hasta posicionarse en los 101,58 yenes. La moneda japonesa ha avanzado también en el cruce con la moneda única, en concreto un 0,2% hasta las 138,12 unidades por euro después de tocar los 137,99, la cota más alta desde el 6 de febrero. Por su parte, la divisa comunitaria se cambiaba por en 1,3598 dólares.
