La constructora que preside Florentino Pérez habría encargado a BBVA y Société Générale la venta de su filial de servicios urbanos con el objetivo de reducir deuda. Entre los protagonistas de la sesión, Banco Santander, que podría estar valorando la toma de control de William & Glyn, filial del nacionalizado británico Royal Bank of Scotland (RBS). La operación, que el español ya había tanteado hace tres años a través de su rama de negocio en el país, podría retomarse ahora que se ha relanzado su proceso de venta mediante subasta, según señala Expansión.
La compra de la filial de RBS podría suponer un desembolso cercano a los 2.000 millones de euros para su comprador definitivo. La entidad cuenta con una red de 300 sucursales en Reino Unido que, en conjunto, gestionan activos por cerca de 20.000 millones de libras esterlinas, unos 27.600 millones de euros al cambio de divisas. La intención inicial del rescatado escocés era colocar su marca filial en Bolsa, pero parece ser que el interés de entidades como la presidida por Ana Botín habría sugerido este cambio de ruta.
En el capítulo de operaciones corporativas, también el mismo diario señala que ACS habría reabierto la venta de Urbaser, su marca filial de servicios urbanos. Los encargados de encontrar dueño para la firma por entre 2.000 y 2.500 millones de euros serían BBVA y Société Générale.
Gigantes del sector, compañías especializadas asiáticas y fondos de inversión estarían entre los interesados. Desde Ahorro Corporación enmarcan la posible operación en el programa de reducción de un grupo cada vez más centrado en la construcción. La constructora que preside Florentino Pérez encara los primeros cruces de la sesión con alzas superiores al 1,5% en línea con el agregado Ibex 35.
Por segunda sesión consecutiva, Iberdrola acapara la atención de los inversores por haber completado ya, según lo previsto, la absorción de la estadounidense UIL Holdings. Una vez cerrado este capítulo, este jueves llega la sesión de estreno en Wall Street para su nueva marca: Avangrid. Se culmina así un proceso que arrancó en febrero con la compra de la energética norteamericana por 2.650 millones de euros.
Los inversores ponen en precio también este jueves el anuncio de dividendo que Repsol lanzó ayer ya con el mercado cerrado a negociación. La petrolera, a pesar del brusco abaratamiento que ha sufrido el crudo en lo que va de este año, ha puesto sobre la mesa el pago de 0,466 euros o una acción nueva por cada 22 antiguas, a libre elección de los accionistas de la presidida por Antonio Brufau.
Dos dividendos más marcan la sesión en Bolsa española. Enagás abre su caja fuerte para distribuir entre sus accionistas un total de 0,528 euros brutos por acción a través del Santander. Con este importe, tal y como se puntualizó en la documentación remitida al supervisor bursátil, la sociedad abona ya un 40% del objetivo de 1,32 euros por título que había asumido en su última junta general de accionistas.
El bloque de retribuciones al inversor lo cierra Atresmedia. En este caso, el pago ascenderá a 0,18 euros brutos por acción. El grupo de televisión afrontará el reparto de un total de 40,63 millones de euros a cargo del beneficio de este ejercicio. Importe que se hará efectivo también a través del bróker del Santander.
