Las cuentas trimestrales de la compañía no han logrado colmar las expectativas del mercado y, a consecuencia, se han traducido en recortes de consejo de inversión.
El rebote de Viscofan gana fuerza conforme avanza la sesión de este miércoles para tomar distancia frente a sus mínimos anuales. Las acciones del fabricante de envoltorios cárnicos se apuntan avances del 1,6% a contracorriente y en cabeza de un Ibex 35 que al ecuador de la jornada retrocede más de un punto porcentual.
La remontada de Viscofan está aún lejos de borrar el desplome de las dos sesiones siguientes a la presentación de resultados de la compañía. La cotización de sus acciones ha llegado a descender hasta los 42,53 euros en los cruces más bajos de la sesión del viernes, primera en que los inversores cotizaban cuentas. Un balance en el cual el beneficio neto acumulado al tercer trimestre resultaba un 1,8% superior al del ejercicio pasado pero que venía determinado por cifras intermedias de negocio inferiores a las previstas por los analistas
Dos de las casas de inversión que con más crudeza han respondido al balance trimestral de la industrial han sido UBS y Société Générale. Desde la entidad suiza han reducido el precio objetivo de la cotizada española desde los 46,00 hasta los 41,50 euros por acción. Por su parte, los analistas franceses han aguantado los 47,00 euros por título como techo para su cotización, pero han rebajado su consejo a clientes hasta mantener posiciones en lugar de incrementarlas.
A pesar de la reciente brusquedad de movimientos del valor, su aspecto técnico permanece invariable en un amplio rango lateral que cuenta con su principal soporte en los 41,57 euros por acción y que no dará síntomas de una remontada decisiva mientras no sobrepase los 50 euros unitarios.
Sin embargo, la caída a mínimos anuales ha sido suficiente para atraer a los cazadores de gangas apenas dos semanas después de haber anunciado un nuevo movimiento corporativo. Viscofan anunció entonces la adquisición de la estadounidense Vector, así como sus subsidiarias en Europa, mediante una transacción en efectivo por 3,4 millones de dólares, además de la asunción de deudas asociadas por 10,3 millones.
