Mercados

Los mercados, pesimistas ante el fin de los estímulos de la Fed

El próximo mes de junio termina el plan de estímulo económico de la Reserva Federal de EEUU y los expertos desconfían de que los avances que se hayan podido conseguir con la recompra de bonos y la contención de los tipos de interés se puedan mantener una vez que llegue el fin de este paquete de medidas tan criticadas por algunos analistas. Los expertos temen caídas en la Bolsa y el repunte del dólar.

Los analistas señalan que los inversores se muestran indecisos en las últimas jornadas no sólo por las tensiones de la crisis de de deuda en Europa o la volatilidad en el mercado de las materias primas. Más bien apuntan al fin del ‘Quantitative Easing 2’ de la Fed como causa de buena parte de la incertidumbre que se ha asentado en los mercados, ya que los inversores desconfían de que los efectos que este paquete de flexibilización haya podido conseguir puedan mantenerse estables a medio plazo.

Hoy mismo, el dato del IPC en EEUU, que ha alcanzado su máximo interanual desde octubre de 2008 con un 3,2%, ha provocado que de nuevo muchas voces se alzaran contra la contención de tipos de interés en EEUU. Los expertos dicen que si bien la deflación hubiese sido nefasta para la recuperación económica global, ahora el problema es una inflación desbocada que no se corresponde con las aún tímidas tasas de crecimiento económico que han mostrado las últimas estadísticas y estimaciones al respecto.

En este contexto de desconfianza y negociación intradía más que con perspectivas de futuro, las plazas bursátiles europeas se han terminado por contagiar de las pérdidas del otro lado del Atlántico. El Ibex se situaba, al cierre de esta edición, a la cabeza de las pérdidas. Le seguían Fráncfort, con descensos del 0,64%, Londres (-0,34%) y por último Milán y París, con un retroceso del entorno del 0,25%. Las menos perjudicadas eran las periféricas y Atenas conseguía aferrarse a las ganancias al cierre de sesión (0,38%).

En el mercado de divisas, la volatilidad ha sido la tónica del día. Si bien una vez se han conocido las cifras del PIB europeo el euro fortalecía su remontada, al cierre de esta edición, el dólar reconquistaba el terreno perdido. Cada euro se cambiaba por 1,417 dólares, y cada uno de éstos por 80,68 yenes.

Las materias primas mantenían su cotización casi en plano, a excepción de la plata que se encarecía un 2,5% hasta los 35,18 dólares por onza. El oro recuperaba los 1.500 dólares y a primera hora de sesión llegó a pagarse a 1516,25.

Los bonos a diez años han mantenido su diferencial con respecto al ‘bund’ germano en los 217 puntos básicos. Los periféricos han despedido la semana ligeramente por encima de la sesión de ayer.

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