La petrolera española Repsol ha comenzado la semana con tendencia bajista, entre los valores más rezagados de todo el Ibex 35, con un retroceso de más del 2% en la apertura. De nuevo los planes del Gobierno argentino para con el sector vuelven a hacer mella en la cotización de la presidida por Antonio Brufau.
El pasado viernes, ya con los mercados bursátiles europeos cerrados, el Gobierno argentino anunció la suspensión de programas de incentivos económicos para las grandes petroleras, entre las que se encuentra YPF, la marca filial de Repsol en el país latinoamericano.
Además, el Ejecutivo argentino ha apuntado a las grandes petroleras, el domingo señaló directamente a YPF, de la caída en la producción local de hidrocarburos. Un entuerto que Brufau ya trata de solucionar directamente en Buenos Aires, a donde se ha desplazado, pero que daña la cotización de su compañía.
Los expertos señalan que tras la pérdida de los 21,20 euros por acción, el sendero bajista de la compañía, iniciado con la compra de un 10% de su propio capital a la constructora Sacyr, es la tendencia predominante en el valor. Mientras que no lleguen noticias positivas de Argentina, muchos dudan de que Repsol pueda recuperar la cota de los 22,60 euros de precio unitario desde donde retomar las alzas con solidez.
